La presentación de este trabajo ha tenido lugar en el Ayuntamiento de la ciudad con la presencia del alcalde, Javier Cuenca.
‘Análisis estratégico de la estructura empresarial de la ciudad de Albacete’ es el título del estudio que se ha llevado a cabo en la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), en colaboración con el Ayuntamiento de Albacete, y que servirá de base para desarrollar acciones a través del Plan Municipal de la Competitividad y Creación de Empleo, cuyo grupo de trabajo se ha reunido con la presencia de la vicerrectora de Transferencia e Innovación, y miembro del proyecto, Ángela González; el alcalde de la ciudad, Javier Cuenca, y el director del Centro Europeo de Empresas e Innovación (CEEI), Ángel Prieto. La investigación, que ha sido presentada en el ayuntamiento, proyecta la situación actual empresarial con sus fortalezas y debilidades y la situación deseada en el futuro.
El equipo de trabajo, formado por los profesores de la Universidad regional: María Cristina Díaz García, Ángela González Moreno, Adrián Rabadán Guerra y Francisco José Sáez Martínez, ha analizado las empresas de los diferentes sectores que componen la estructura económico empresarial de la ciudad de Albacete con el objetivo de realizar un diagnóstico estratégico “que permita vislumbrar la situación real en este momento y poder establecer el gap existente entre la situación actual y la deseada en el futuro, así como diseñar las políticas económicas de incentivos empresariales para poder llegar a alcanzar los objetivos planteados”, indican.
La investigación refleja que existen muchos factores que inciden en la competitividad geográfica y, en consecuencia, muchos son los frentes en los que se puede actuar para favorecer la atracción de empresas y mejorar las condiciones económicas de los ciudadanos. En este análisis se han evidenciado las fortalezas y las debilidades de la estructura empresarial y se ha puesto de manifiesto qué condiciones presentan en cuanto a su potencial de crecimiento y su capacidad para generar resultados, una información que se corresponde en parte con el análisis del dinamismo económico, del capital humano y la innovación.
El trabajo recoge como principales conclusiones que la ciudad de Albacete tiene buena dotación de recursos directivos y organizativos, de marketing, pero importantes debilidades en los recursos técnicos y tecnológicos. “Estas valoraciones se han realizado en comparación con la competencia, y si bien, tanto en las actividades industriales como en las de los servicios han manifestado esa debilidad, ésta ha sido más frecuente e intensa en el sector industrial”, indican.
Otro de los aspectos concluyentes es que las empresas albaceteñas necesitan reforzar sus estrategias de internacionalización, de innovación de procesos y de gestión “y sobre todo, para poder abordarlas, deberían manifestar un comportamiento más cooperativo del que están llevando a cabo en la actualidad”. De esta forma, apuntan a que las medidas de apoyo por parte del ayuntamiento deben requerir una actitud proactiva en dichos ámbitos, diseñando incentivos para dirigir los comportamientos hacia los factores competitivos de innovación, internacionalización y cooperación.
En este sentido, los investigadores señalan diferentes recomendaciones para la mejorar de la estrategia empresarial con acciones dirigidas en los ámbitos anteriormente mencionados como: seminarios que puedan influir en la cultura de innovación de las empresas; servicios de asesoramiento y ayuda a la resolución de problemas; facilitar el acceso a las vías de financiación públicas; fomentar la incorporación de jóvenes tecnólogos en las empresas; formación; facilitar la incorporación de titulados universitarios; crear foros de empresas de carácter sectorial o multisectorial relacionados con la cadena de valor; encuentros universidad-empresa para cooperar desde diferentes ámbitos empresariales; fomento del sector de biotecnología; inicio de una estrategia de ‘Smart City’ con la finalidad de hacerse más accesible, sostenible, eficiente e interconectada; o potenciar la imagen de la ciudad a través de una marca única de “Albacete” para los productos que se fabriquen en la ciudad, entre otras.